La figura de José de San Martín ha quedado instaurada y afianzada como Padre de la Patria.
Fue un estratega militar que luchó por la independencia de los pueblos sudamericanos, y defendió los principios de libertad, justicia y unidad.
Su legado trasciende el ámbito militar, habiendo promovido la educación, el respeto a las instituciones y la necesidad de una América Latina unida y soberana.
Cada año, en esta fecha, conmemoramos su paso a la inmortalidad, porque su ejemplo sigue guiándonos hacia un futuro de dignidad y libertad.